En primer lugar, permítame explicarle qué es una predicción astrológica.

Las predicciones astrológicas no deben tomarse como una previsión absoluta de los acontecimientos y la vida entera no debe basarse únicamente en las predicciones astrológicas.

Una predicción astrológica no es más que una herramienta -aunque muy eficaz- para comprenderte mejor a ti mismo y mirar tu vida desde otra perspectiva.

Un horóscopo puede compararse con el manual de un coche: te muestra cuáles son tus opciones desde la línea de salida (es decir, desde el momento en que naces) y qué averías y problemas puedes esperar después de tantos kilómetros.

Sin embargo, depende de ti cómo conduzcas el coche después de salir de fábrica, así como de muchos otros factores: si mantienes el estado del coche y lo conduces con cuidado, si surge algún imprevisto en la carretera, etc. d. Así que no es nada seguro que todo vaya como suponías al principio. Sólo hablamos de la probabilidad de que se produzcan determinados acontecimientos.

Muchos de los acontecimientos que se examinan en el marco de la predicción astrológica son fenómenos naturales. En la naturaleza no hay límites claros. Un fenómeno desaparece y es sustituido gradualmente por otro. También en el cielo. Una constelación pasa a otra. No hay fronteras claras que separen un grupo de estrellas de otro.